Una crema con textura extremadamente sedosa gracias al sistema de molienda de discos y refinado. La delicadeza de los aceites de almendra realzados por el tostado se fusionan con los sabores del cacao y sus notas envolventes. Rica en fibra y proteínas.

Tómala de mil maneras. Untada en tostada o en galletas. Con trozos de fruta fresca como el plátano, la fresa o la manzana. Añade una cucharada de crema de almendras a tus batidos proteicos. Como topping de helados o en tus rellenos de tartas. La crema de almendras es tan versátil que estimula la creatividad de los auténticos Gourmapes.