La acción de grabar se compone de dos tareas. Por una parte, la acción de crear una representación en un soporte con instrumentos cortantes para crear una imagen que puede transferirse a un papel. Por otra, la posibilidad de repetir la estampación numerosas veces, lo que favoreció su divulgación y la democratización de la imagen.

Hasta el siglo XVIII, la enseñanza del oficio del grabador recurrió a tratados y a la transmisión era de tradición familiar. Sin embargo, la complejidad técnica del grabado en metal obligaba a una formación larga y especializada. Fueron las reales academias de San Fernando, en Madrid, desde 1752 y San Carlos, en Valencia, desde 1768, las que sistematizaron el estudio y la práctica del grabado.

En paralelo, la Real Calcografía, fundada en 1789, resultó determinante para el desarrollo del grabado en España. La Calcografía Nacional ha ido diversificando sus funciones y actividades hasta llegar a ser un referente en el mundo del arte gráfico, solo comparable con las de París y Roma. Entre sus principales objetivos está la conservación de las casi 10.000 planchas que atesora, un patrimonio artístico de extraordinario valor. Destacan las 228 láminas de cobre de Francisco de Goya, obras maestras de la historia del grabado.

En el pliego premium, perteneciente a la serie filatélica Oficios antiguos, se puede observar una imagen del instrumento con el que realizaban la técnica de grabado. Además, puedes conseguir el sello de la misma emisión.

Producto de Correos, vendido y enviado por Correos

Impresión: Offset

Tamaño de cada sello: 49,9 X 33,2 mm

Fecha Publicación: 28 de septiembre de 2023

Formato: pliego premium con 6 sellos de 3 €

Tirada: 18.000

Producto exento de IVA