Curación mínimo 7 meses.

Sabor más persistente sin llegar a ser agresivo en el paladar.

Se diferencia de otros quesos en su textura ya que no se quiebra al porcionarlo.

Ideal para restauración y para presentaciones de todo tipo.

Los quesos que proceden del municipio Toro tienen, como señal distintiva, la marca de calidad D.O. Queso Zamorano. 

Los métodos de elaboración y maduración siguen siendo los desde hace siglos: leche cruda, cuajo natural de lechazo y sal. Debido a esta longeva tradición, los quesos de oveja de Toro son galardonados, año tras año, con premios internacionales de quesos y gastronomía.
Comprende variedades como el Reserva, Viejo, Curado o en manteca. Como colmen de esta filosofía gastronómica quesera, en 2016 se inauguró en la localidad toresana, el único Museo del Queso de Zamora, situado en un edificio colindante a la Quesería Chillón Plaza. Alberga numerosas piezas centenarias, historias y tradiciones de una familia de artesanos queseros. Las instalaciones del museo muestran tanto la recepción de la leche, como el proceso de elaboración del queso de oveja, el salado de las piezas, la fase de maduración y la expedición final del producto.